Me marcho, pero ahora sé que TU estarás siempre conmigo… PADRE.

No me podía marchar de Córdoba, ese domingo, de la ciudad que sin pedírselo me ha dado tanto, sin volver a cruzarme la mirada con Él… para que en ése último instante, me diese fuerza, aliento y valor. Ahora estoy en deuda contigo Padre, ya seas Rescatado  o derramando tu Gran Poder… Gracias por no abandonarme.

Comparto con ustedes este pequeño álbum del Resatado y su bendita Madre Amargura en sus pasos tras la salida extraordinaria.

 

Un comentario en “Me marcho, pero ahora sé que TU estarás siempre conmigo… PADRE.

Los comentarios están cerrados.